La experiencia indica que para cualquier persona que presente problemas para concebir es una situación difícil, pero es un proceso más llevadero cuando se vive en pareja. Se sabe que una de cada cuatro parejas en países subdesarrollados está afectada por la infertilidad. De ahí que existan diversos tratamientos de reproducción asistida que permiten a estos pacientes hacer realidad su anhelo de tener un hijo.
“La infertilidad es un problema de ambos miembros de la pareja, por ello es importante tomar un espacio para conversar sobre el diagnóstico y las posibilidades a futuro de lograr un embarazo. Existen varias técnicas de reproducción asistida que el médico tratante puede recomendar de acuerdo con las circunstancias, pero existen dos que son las más reconocidas y utilizadas: la inseminación artificial (IA) y la Fecundación In Vitro (FIV)”, explica la doctora Mayka Morgan, especialista en medicina reproductiva de IVI Panamá.
En este contexto, no debemos olvidar que no solo existen parejas formadas por una mujer y un hombre, sino que hay otros modelos de familias como las compuestas por dos mujeres y también hay féminas que buscan ser madres solteras. En estos casos puede que no presenten ningún problema de fertilidad, pero deben buscar la ayuda de un especialista para conseguir su embarazo con técnicas de reproducción asistida como la Ovodonación, el método ROPA y el uso de esperma del banco de semen.
La clave del éxito para que las parejas logren un embarazo
Cada caso es único, de ahí la importancia de la atención personalizada, brindando un diagnóstico certero que permita determinar el mejor camino para lograr su embarazo. La clave del éxito de los tratamientos de reproducción asistida varía en función del tratamiento elegido y del pronóstico reproductivo de cada paciente.
En las clínicas de reproducción asistida de IVI Panamá, las técnicas como la FIV con óvulos propios tienen un 70% de posibilidades de conseguirlo en el primer intento (usando todos los embriones obtenidos en ese ciclo, pero en diferentes transferencias), llegando a un 94% en el tercer intento.
La inseminación artificial, por su parte, al ser un tratamiento de baja complejidad, ofrece tasas de embarazo inferiores a otros tratamientos de reproducción asistida, pero superiores a las de una relación sexual o lograr un embarazo de manera natural.
En el caso de que la paciente utilice un tratamiento de ovodonación, tiene un 84% de posibilidades de conseguirlo en el primer intento (usando todos los embriones obtenidos en ese ciclo, pero en diferentes transferencias), llegando a un 99% en el tercer intento.
“Para todos los casos, IVI presenta las mejores tasas de embarazo, gracias a su tecnología avanzada, la constante evolución y perfeccionamiento en el campo de la medicina reproductiva en conjunto con especialistas de categoría mundial”, manifiesta la doctora Morgan. No obstante, existen muchos factores que afectan las posibilidades de éxito de una pareja. Primero se toman en cuenta la edad, el peso, los factores de estilo de vida, los motivos de infertilidad y cuántos ciclos