Es cierto que la edad es un factor crucial en los tratamientos de reproducción asistida, especialmente para las mujeres, ya que la cantidad y la calidad de los óvulos son esenciales para el éxito de estos procedimientos. Y como es conocido, a partir de los 35 años los óvulos disminuyen, trayendo como consecuencia embarazos menos viables, lo que representa la preocupación central de los especialistas en fertilidad.
“Entre más edad tenga una paciente menor es el número de óvulos disponibles en sus ovarios, esto sumado a la caída en la calidad ovocitaria, puede representar un desafío significativo. Por esto es fundamental que las mujeres sean conscientes de cómo la edad puede afectar sus posibilidades de tener un bebé. Cabe resaltar que las alternativas y estrategias de tratamientos pueden variar en función de la situación particular de cada paciente, alcanzando cifras exitosas. En IVI, muchas parejas y consiguen su sueño de ser padres con la ayuda de los tratamientos de fertilidad”, manifiesta la doctora Mayka Morgan.
Doctora Mayka Morgan, especialista en medicina reproductiva en IVI Panamá.
Es por esto por lo que toda mujer que planee tener un hijo debe realizar dos importantes pruebas diagnósticas: la ecografía 3D y la medición de niveles de hormona antimülleriana (AMH). En conjunto ofrecen una visión comprensiva y detallada de la salud reproductiva femenina. La ecografía proporciona una evaluación precisa de la anatomía y morfología uterina, mientras que la medida de AMH ofrece información valiosa sobre la reserva ovárica.
“Aunque no hay un límite establecido para que una paciente pueda realizarse un tratamiento de reproducción asistida, la recomendación de los especialistas es hacerlo antes de los 35 años, en especial si el plan es preservar la fertilidad para tener su bebé más tarde y así no sacrificar su reloj social por el reloj biológico”.
Doctora Morgan.
Opciones para ser mamá a una edad avanzada
La investigación avanzada que realiza IVI en medicina reproductiva ha proporcionado una variedad de opciones para aquellas pacientes que enfrentan dificultades para concebir de manera natural. Desde la preservación de la fertilidad en edades más tempranas hasta técnicas avanzadas de reproducción asistida como la fecundación in vitro (FIV), Ovodonación, las de alta complejidad y hasta un Centro de Rejuvenecimiento Ovárico.
El hecho de que el 53% de las pacientes de IVI tengan 40 años o más es un testimonio de su experiencia y éxito en el tratamiento de casos complejos de fertilidad.
Es importante destacar que muchas de las pacientes de IVI acuden con un historial complicado, lo que puede incluir intentos previos de concepción sin éxito, pérdidas gestacionales o problemas de salud que afectan la fertilidad. En este contexto, IVI no solo ofrece soluciones médicas avanzadas, sino también un apoyo emocional integral durante todo el proceso. La combinación de tecnología de punta, investigación de vanguardia y una atención personalizada que es la clave de estos tratamientos.
Cada paciente es única y puede enfrentar desafíos específicos en su viaje hacia la maternidad. Por lo tanto, contar con un equipo médico especializado que pueda evaluar las circunstancias individuales y recomendar el enfoque más adecuado es fundamental para maximizar las posibilidades de éxito y garantizar la mejor atención posible.