La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió que si no se toman medidas urgentes contra la resistencia a los antimicrobianos (RAM), la esperanza de vida global podría disminuir en 1,8 años para el 2050. En 2019, se registraron cerca de cinco millones de muertes relacionadas con infecciones bacterianas resistentes a los medicamentos y 1,27 millones de personas fallecieron directamente por la RAM; el 20% de estos decesos fue en niños menores de cinco años.
La OMS alertó que la resistencia a los antimicrobianos no discrimina entre personas, edades ni fronteras; sin embargo, los países en desarrollo y las personas en situación vulnerable son los más afectados, debido al limitado acceso a los antimicrobianos y a herramientas de diagnóstico seguras y efectivas. Asimismo, a causa de la RAM, hay más peligro en la eficacia de la prevención y el tratamiento de una serie -en aumento- de infecciones por virus, bacterias, hongos y parásitos.
“En Pfizer, hemos liderado la lucha contra los desafíos de las enfermedades infecciosas desde la década de 1940, con nuestro trabajo pionero sobre la penicilina, y en el año 2016, reafirmamos este compromiso al firmar la Declaración sobre la Lucha contra la RAM. Como líder mundial en antiinfecciosos, seguimos dedicados a desarrollar vacunas y medicamentos innovadores, así como soluciones que van más allá de la medicina,en beneficio de la calidad de vida de los pacientes”, afirmó la Dra. Monique Baudrit, líder médica de Pfizer Centroamérica y Caribe.
Un estudio publicado en la revista The Lancet pronostica que para el año 2050 la RAM causará 1,91 millones de muertes directas y 8,22 millones de fallecimientos relacionados, a nivel mundial. Entre 2025 y 2050, se proyecta un acumulado de más de 39 millones de muertes directas y alrededor de 169 millones de fallecimientos asociados a la resistencia a los medicamentos.
¿Qué es, cómo afecta y cómo prevenir la RAM?
Los antimicrobianos -conocidos comúnmente como antibióticos, antivíricos, antifúngicos y antiparasitarios- son medicamentos desarrollados para prevenir y tratar infecciones en humanos, animales y plantas. La RAM ocurre cuando bacterias, virus, hongos y parásitos desarrollan resistencia a estos medicamentos, lo que hace que las infecciones se vuelvan cada vez más difíciles o imposibles de tratar e inclusive, se dé la aparición de formas graves de enfermedades o hasta la muerte.
Sin antimicrobianos eficaces, tratamientos médicos como los trasplantes de órganos, el control de la diabetes, la quimioterapia en casos de cáncer y las cirugías mayores enfrentan altos riesgos. La aparición y propagación de la resistencia se debe, principalmente, al uso indebido y excesivo de antimicrobianos.
“En este contexto, las vacunas juegan un rol crucial para reducir la RAM, ya que ayudan a prevenir infecciones bacterianas y, en consecuencia, reducen la necesidad de antibióticos o de su uso excesivo y el riesgo de desarrollar cepas resistentes”, señaló la Dra. Baudrit.
La RAM puede presentarse tanto en la comunidad como en los hospitales. En la comunidad, suele manifestarse como infecciones urinarias y respiratorias, mientras que en hospitales incrementa los costos de hospitalización, así como de prescripción de medicamentos y afecta a pacientes vulnerables en unidades de cuidados intensivos, oncología y neonatología, donde se asocia con alta mortalidad.
Para combatir la RAM, es fundamental fomentar la prescripción adecuada de antimicrobianos, la educación comunitaria y el cumplimiento de las normativas de uso y dispensación de estos medicamentos.
La resistencia a los antimicrobianos representa una crisis de salud pública global, inclusive, en la actualidad, ha comenzado a afectar la lucha contra otras enfermedades, como el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) y la malaria.